Mis amores yo los vuelvo a recordar - Parte I

En mi vida han habido hombres por los que perdí la cabeza y entregué no sólo el cuerpo, sino también el corazón.

Hasta el día de hoy los más resaltantes han sido:

1. El Conejo

2. El Chato

3. Chapita

4. El Filósofo

5. El Tío

6. El Gordo (el firme, el actual, el legal)

Este listado es por orden cronológico, y no incluye agarres, calenturas, vacilones ni choque-y-fugas. Son los apodos de los hombres por los que yo hubiera podido entregar hasta la vida, si es que no me hubieran pagado tan mal (a excepción de mi gordo, que hasta ahorita se ha portado muy bien).

Pero el capítulo de hoy va dedicado al Filósofo, pues los acontecimientos que han acontecido en las últimas semanas lo ameritan. Y la historia dice así...

El filósofo

Cuando lo vi por primera vez tuve que contener el impulso de apapacharlo. Cuando hablé con él por primera vez, sucumbí a su bien ánimo y dote de palabra. Tenía un año más que yo y estudiaba filosofía. A pesar que yo siempre me mostré reacia y una taba para esa disciplina (con el perdón de los filósofos por llamarla así), congenié excelentemente bien con el filósofo.

Pasábamos la tarde llenando los crucigramas del Perú21, y esa actividad nos unió mucho, no sólo en amistad sino también en espacio, pues cabeza con cabeza pensábamos en las soluciones de los crucigramas.

En menos de un par de meses, cuando me di cuenta, yo estaba enamorada hasta el tuétano. Pero no sabía si era correspondida. Todos mis amigos me decían en buena onda que él era casi un santo, un chico sano, sin vicios, brillante y sin enamorada. Me cochineaban diciéndome que yo tome la inciativa, que es un filósofo ahuevado para estas cosas, que dé el primer paso. Siendo esta la situación, un buen día me armé de valor y le dije para salir a tomar un vino, el pobre picó el maicito, y luego del vino me lo chapé, sí señor, lo besé con todas las ganas que tenía y con toda la emoción y el amor que el filósofo me había generado.

El tiempo pasó y el sentimiento crecía día a día. Creo que si hubieran hecho un censo un la facultad, nosotros nos hubiéramos llevado el primer puesto a la pareja ideal. Éramos el uno para el otro. Un cague de risa, yo sociable y el encantador, yo con los pies en la tierra y él soñador, yo con planes a futuro y él, soñando con un mundo mejor.

Dios sabe bien cuánto lo amé, porque lo amé con todo mi ser, con toda mi vida, amaba cáda una de las células que formaban su cuerpo. Amaba sus rulos, amaba su forma de reír, amaba hasta las legañas que se le formaban, me cagaba por él!!! Juntos estuvimos 4 años. Con altas y bajas, pero después de los 2 años, la cosa iba en decadencia. Él nunca me paró el macho en mis arranques, nunca se inmutaba, nunca discutía conmigo, el mundo entero podía caerse en frente de nuestros ojos, y el otro ni se daba por enterado. Me conocía como la palma de su mano pero yo a él no tanto. Era de poco contar. Yo iba a 100 y él a 10. Su parsimonia con la vida me exasperaba. Tuvimos un huevo de errores, algunos peores que otros, y tal vez los míos más imperdonables, pero yo lo amaba.

Me ayudó en muchas cosas que hice en mi vida, me ayudó a concretar algunos planes, me ayudó a soltarme, me ayudó a pensar en grande, era como si él fuera el cerebro y yo la maquinaria que ejecutaba. Juntos éramos un par formidable. Pero la cosa iba en decadencia. A eso le sumo que demoramos bastante en intimar, es decir, él se negaba aduciendo que me respetaba. Cuando vimos que la cosa iba de mal en peor, decidimos dar el paso, y nos entregamos. Yo era virgen (aunque de este tema me gustaría profundizar en otro post) y él, casto. Fue algo mágico, lindo, maravilloso, pero que lamentablemente no pudo salvar lo que teníamos.

Ya por el final, la amargura era de todos los días. Me di cuenta que el amor que alguna vez había sentido por él se había esfumado, ya no había, ya no estaba, y que de pronto ya no lo veía como mi enamorado, sino más bien como un hombre al cual yo le tenía mucho cariño, gratitud, casi casi como un hermano. Me di cuenta también, que si en el pasado yo me desvivía para engreirlo (porque cuando estoy enamorada soy cojudamente engreidora), ahora me llegaba a la punta de la teta izquierda sus caprichos. A veces ya ni lo soportaba a mi lado, su sola presencia me molestaba, me ponía de mal humor, le hablaba feo, ponía pretextos, y en el momento del chuculún, el momento de la verdad, era una cosa incestuosa, impensable, herética. Eso hacía que me sienta pésimo, por las patas del caballo, me séntía mala, mala, maldita...

Lo anterior, más mi espíritu coqueto y conquistador, me llevó a buscar otros horizontes, y caí en las garras de otra pasión que al final me resultó más dolorosa, fue en estas que conócí al "Tío". Así, llevé una vida paralela viviendo un infierno con el filósofo por cuan mal estaban las cosas más mi cargo de conciencia, y por el otro, viviendo una ilusión efímera a distancia...

En ese punto las cosas se volvieron insoportables, intolerables, insostenibles. Océanos de lágrimas derramamos ambos tratando de salvar lo insalvable pero ya no había nada que hacer, hasta que un buen día decidí terminar con él. Ese día supe lo que era matar a alguien, porque lo que yo hice con él fue homicidio en primer grado. Me sentí una basura, una porquería, una asesina degollando a un carnerito. Sentí que le quitaba la vida. Y así fue.

La separación que tuvimos fue una de las peores cosas que me pasó en la vida, porque hay separaciones y separaciones, pero esta fue mortal. Lloramos hasta decir basta, sus llamadas al celular no paraban, sus mensajes, sus mails, sólo provocaban que yo termine llorando a moco tendido al frente de mi PC. Este desangramiento tuvo su tiempo, meses pasaron y el llanto continuaba, la costra se me levantaba cada vez que recibía un mail suyo, un mensaje al celular. Para ese entonces, yo ya estaba con el Gordo en mi afán de buscar un buen amor, y fue él quien, bronca de por medio, me dijo que cortara del todo ese contacto con mi ex, por el bien de nuestra relación. Ahora que lo pienso, fue lo más sensato que me dijo.

Otras personas llegaron a mi vida, el tiempo pasó, la herida sanó, pero la cicatriz quedó. Lo bloquié de mi messenger, lo borré de mi vida. Hasta hace unos meses recién decidí agregarlo al Gmail. Sólo para saber cómo estaba, en qué andaba, pues amistades en común me mantenían relativamente informada en las cosas que él hacía. Como es tan pero tan bueno (la verdad es que es un pan de Dios, aunque no es creyente porque sus ideales filosóficos se lo impiden), muchas personas se aprovechaban de él. En su afán de héroe olvidaba que en este mundo hay personas malas, y que la envidia es gratuita. Supe que tuvo momentos muy duros, académicamente y en lo laboral también y eso era algo que me preocupaba, pues a pesar de todo lo que pasó yo siempre conservé una amistad sincera para con él...

Y así, luego de casi 4 años volvimos a conversar. Meses después, un buen día sin motivo ni razón aparente me preguntó lo siguiente:

- Te puedo pedir algo?

- Claro, con toda confianza, a menos que sea billete porque no tengo.

- No es eso. Necesito cerrar el capítulo que tuvimos y para eso, necesito que me perdones por los errores que cometí contigo.

- Oye, no te pases, ya fue, tanto tiempo ha pasado, olvídate de eso, los dos tuvimos culpa en eso.

- No, necesito leer que me perdonas por todo, porque ya no puedo más, siento que arrastro una roca esperando tu perdón, necesito aliviar el peso de mi culpa, por eso te pido me perdones.

- Si tanto insistes, pues bien, te perdono, pero déjame decirte que eres tú el que debe perdonarme a mí, porque aunque no lo creas, yo la cagué más...

Me dijo que, efectivamente, murió en vida cuando terminamos y que le costó mucho levantarse de aquella caída. Que era un hombre que no había nacido para el amor pero que conmigo lo intentó. Me dijo también que había intentado algo con alguien, pero que aparentemente cometió los mismos errores y recién ahí empezó a cavilar al respecto. Sin querer queriendo terminé moqueando al frente del computador, luego de leer todo lo que me decía y todo lo que yo le decía, pues por fin hablábamos de forma abierta y directa de aquello que nos hizo sufrir mucho.

Aproveché para decirle que me dolió mucho que él se tomara casi 4 años en averiguar que de verdad me amaba, que me dolió mucho que le tomara su tiempo soltar un "te amo", que me dolió mucho no poder mostrarnos abiertamente como pareja frente al mundo entero, que me dolió mucho que nunca explotara ni tuviera arranques, que me dolió mucho no conocerlo tan bien como él me conocía a mí, entre otras cosas.

Carajo! Cuánto sufrí, de pensarlo se me aguan los ojos. Pero fiel al castigo, y siguiendo mi instinto sado-masoquista, para cerrar aquella conversación, le pasé el link de la canción que considero representa mejor lo que pasó entre los dos. Siento que yo fui aquella chica que esperó que entreguen todo de sí, pero que esperó en vano...

Ahora que ya nos perdonamos, aparentemente ya me tiene más confianza, al punto que me ha dicho que si me caso lo invite para que por lo menos me mande regalo de novia (qué payasín). Esto me permitió contarle que en enero empiezo a convivir con mi pareja y creo que le chocó un poco la idea pero lo disimuló bien. A veces, me pongo a pensar en cómo hubieran sido las cosas de seguir juntos, y creo - y nadie me va a sacar de ese pensamiento - que hubieramos llegado lejos, muy lejos...

Pero C'est la vie, le show debe continuar porque hay mucho camino que recorrer. Solo espero y deseo de todo corazón, que él llegue a buen puerto, supere sus miedos y vuelva a amar - aquel que no ha pecado, no es humano... aquel que no ha querido, no ha vivido... - pues él se merece lo mejor de este mundo.

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Anéctoda de los últimos días

Hace una semana tuve el matrimonio de una amiga de colegio a la que quiero muchísimo, y que luego de más de 10 años intentando liberarse de su familia y convencerlos que el papá de su hijo era un chico bueno, por fin se casó.

Fue en La Molina la cosa, y si bien asistí a la ceremonia religiosa, no tenía ninguna intención de pasar a la recepción que iba a ser en Surquillo. Estaba sólo con una amiga, pues mi gordo no pudo ir conmigo, y además los tacos me estaban matando.

Como a las 10pm decidimos regresarnos a nuestras casas, y a pesar que estábamos todas producidas, decidimos tomar microbio nomás. Desde aquel lugar no había un micro directo a mi casa, así que tuve que empalmar con otro en Risso con Arequipa, y fue ahí donde algo pasó.

No voy a decir que estaba un cuerazo, no me alucino tampoco, pero creo que no me quedaba mal el vestido que tenía puesto. Un escote provocador, vestidito a la rodilla pero con abertura al medio, más los taquitos, el cabello acomodado y maquilladita, supongo que alguna impresión habré causado (modestia aparte). Sin embargo, me confudieron con una polilla. Sí señores, me confudieron con una puta (de alto vuelo supongo, jaaaaaaa!).

Estaba yo parada en el paradero de Risso, a las 11.15pm esperando mi micro, (sí, sí, la más usura) cuando me di cuenta que toda la gente que estaba en el paradero cuando yo llegué ya se había renovado, y que poco a poco se iban haciendo menos. El micro que yo esperaba nada de venir, y eso me tenía nerviosa pues yo con mi carterita, mi celular y mi cámara éramos presa fácil para cualquier amigo de lo ajeno.

En eso me di cuenta que había un tipo que no se había movido, y que me estaba mirando inspecciosamente. De rato en rato yo volteaba y ahí estaba el asqueroso ese, mirándome y fácil, alucinándome también. Decidí caminar un poco más allá para tenerlo lejos, pero el tipo caminó en mi dirección y se paró a unos metros de mí. Al poco rato, volvió a subir y cuando se cruzaba por mi lado me dijo:

- Habla flaquita, cómo es?

Creo que por cómo estaba vestida, y por mi carita de "yo no fui", no esperaba que yo le responda lo que le respondí.

- FUERA MIERDA!

Acto seguido sacudí mi melena y toda mi humanidad se dirigió al micro que por fin llegó. Luego me quedé pensando, temerosa, qué hubiera sido de mí si el micro no llegaba, porque en esas fachas tampoco me subo sola a un taxi.

¿Se dan cuenta por lo que tiene que pasar una mujer en estos días? Pero si el tipo seguía jodiendo, juro que le clavaba el taco en la cara y ponía en práctica mis patadas que tanto sudor me cuestan en el gym.

En fin, pronto escribiré algo más.

Feliz navidad!!!

Cambiando para bien!

Años luz que no entro a la blogósfera. No he leído los post de los vecinos bloggers, y no he tenido tiempo para postear algo. Es más, acabo de entrar y he visto que tenía un comment por moderar de sabe Dios hace cuánto tiempo. Esta situación me ha tenido atormentada, el no poder escribir, el no poder leer, el no poder sapear las notas de los bloggers me ha tenido, por decirlo así, sufriendo horrores cual periodo de abstinencia.

Pero esto se acabó! Intentaré no demorar tanto en estos quehaceres por el bien de mi salud mental.

¿Por dónde empiezo a contar tanto tiempo de ausencias? Presentaré esto a modo de informe (de esos que me tienen loca en el trabajo).

Y dice así...

Lima, 02 de octubre de 2010

Sres.
Todos los interesados en leer este post
Presente.-

De mi mayor consideración,

Por medio de este post, reciban mi más cordial saludo, y a su vez permítanme presentar a modo de resumen las actividades y hechos más resaltantes durante mi ausencia de la blogósfera. Para facilitar la lectura, el informe está divido por capítulos.

Padrino Max
El tiempo apremia mi agenda ultimamente, sin embargo cada que puedo voy a visitarlo. Uno de esos días nos fuimos a almorzar al Rovegno de Arenales, mientras conversábamos de todo un poco. Me contaba que había ido con mi madrina al matrimonio de una ahijada que no veían hace 20 años, y que además de ser una profesional era asimilada a la marina y que conoció a un alemán y que se casaron y que ahora ella se va a Alemania.

Cuando me lo contó, sentí que mi madrina le había puesto cosas en el cerebro a mi padrino, porque ella es la que me alucina con alguien "mejor" o algo asì. Ella tiene aires de grandeza, siempre ha sido asì, una buena persona pero con aires de alcurnia, jajaja. Es màs, muchas veces me ha dicho en mi cara pelada que no soporta al gordo porque "es muy simple para mì" y yo pienso para mis adentros "tù no te lo vas a chantar asì que no te quejes!". Linda mi madrina carajo.

En fin, aprovechando el tema, le contè a mi padrino que yo tambièn habìa pensado en salir del paìs, le contè que postulè a 2 becas para ver si ligaba mi maestrìa afuera, pero no ligò. Y en todo eso, perdì un año que pude haber empezado una maestrìa aquì. En conclusiòn, hasta que no encuentre una beca que me cubra todo al 100% no saldrè del paìs. La deuda que tengo por mi depa no me deja màs que aire para respirar, no podrìa hacerme de otra deuda màs para poder largarme. Creo que mi padrino lo entendiò.

No sè què otras cosas estuvimos conversando, y de pronto empezamos a recordar mis èpocas de chiquititud, con èl a su lado, las cosas que hacìamos, etc. De pronto, una làgrima brincò de mis ojos al ver que mi padrino se ponìa triste, aguantando las làgrimas, mientras me decìa "hija, tanto tiempo... tanto tiempo ha pasado...", no pude màs, le tomè la mano, y rompiendo el cascaròn de dureza que me caracteriza, le dije lo que no le habìa dicho antes cara a cara: padrino, no tienes idea de cuànto eres para mì, te quiero demasiado padrino... Y nuestras làgrimas cayeron...

En agosto estuvo de cumpleaños. Cumplió nada menos y nada más que 78 años. Da gusto ver la lucidez que tiene y la vitalidad con la que se maneja en su día a día. En coordinación con sus hijas que están en Miami, celebramos su cumple con marichis y tortita en la tienda, en el centro de Lima. No se lo esperaba, fue todo sorpresa para él y bailamos y brindamos a su salud. Dios me lo bendiga siempre.

Trabajo
Tengo problemas con mi jefa. O mejor dicho, mi jefa tiene problemas conmigo. No concibo un jefe que no pueda enfrentarse a su personal, o que no tenga apertura suficiente como para escuchar a todos. No concibo la idea de un jefe pidiendo ayuda a su jefe, para poder solucionar un lío de tías. Lo malo de todo esto es que está afectando el desempeño laboral de todos en la oficina. Soy de la idea que en el área hay muchos calzones.

Creo firmemente que necesitamos un macho (y si está bueno, mejor) para que equilibre tanta hormona menopáusica. Pero como eso es algo que no va a pasar, pues la jefecita debería tomar acciones, no? Pero no. Eso no pasa. Si le parece que alguien está actuando mal, o haciendo mal sus cosas, no te llama para conversar al respecto, sino que por el contrario, afila sus dedos, revienta el teclado y manda mail-bomba a Dirección. Es eso posible?

Espero que recapacite y vea que ante los ojos de todos no está quedando como buena jefa. Esperemos cambie, por el bien de todos.

Desde hace más de 2 meses, ando de reunión en reunión en el trabajo. Me han diagnosticado ojo seco debido al esfuerzo que hago con la vista, trabajando con planos y escalímetro. Cosa que no es mi chamba, pero que sin embargo lo hago gustosa. A Dios gracias, me gusta mi trabajo y lo que hago, pero ultimamente me siento algo (más) cansada. Llegan pedidos urgentes, reuniones de comisiones de trabajo, cuestiones con el personal y otras cosas, que me aterro todos los días viendo cuánto crece lo pendiente sobre mi escritorio.

Sin embargo, veo que el año se ha pasado volando y que pronto pronto será Navidad y Año nuevo, y descansaré rico y feliz =), como dicen, al mal tiempo darle prisa.

Mi papá (biológico)
Life is beautiful... No me cansaré de decirlo. Los hombres aprendemos de los golpes de la vida. Y creo que si no aprendemos es porque no merecemos la gracia de Dios. Hace un tiempo, papá casi muere. Es más, estoy casi segura que vio la luz al final del tunel, pero que de puro macho se resistió a ir hacia ella.

Tenía mis dudas. Luego de una relación por años más que conflictiva y dolorosa, tenía miedo de que todo siga siendo igual. Algunas personas me dijeron que no me emocione, pues tal vez mi padre no iba a cambiar e iba a seguir siendo la misma persona amargada que era. Lloré mucho cuando se accidentó. Lloré más cuando pensé que se iba a morir y no íbamos a poder decirnos que nos perdonábamos mutuamente y que en el fondo, nos queríamos.

Sin embargo, Dios existe. Puedo dar fe de ello. Creo que se nota, además, que lo he mencionado varias veces en este post, no? Mi padre a abierto los ojos. Según sus propias palabras, tiene la necesidad de vivir, y vivir bien, sobre todo consigo mismo. Ahora nos llamamos, me cuenta cómo está, le cuento como estoy, y andamos en contacto. No voy tan seguido a verlo porque vive lejos y termino cansada al fin de semana, pero para eso tenemos el celular.

Hace un par de semanas me llamó y me dijo que necesitaba hablar conmigo urgentemente. Miles de cosas pasaron por mi cabeza, pero la idea más fuerte que yo tenía era que él me iba a pedir dinero para sus medicinas. Llegó el fin de semana y me dijo que le urgía hablar conmigo, y que nos encontráramos en un punto medio entre su casa y la mía. Nos encontramos, nos fuimos a una bodeguita a tomar un frugos, y lo veía nervioso, pensativo, no sabía cómo empezar la conversación. En eso, se quedó callado y las lágrimas le cayeron de los ojos. Decía "hija, te voy a pedir algo, espero no me rechaces hiija..." ¿Qué podría ser aquello? Luego de conversa de varias cosas, lo dijo. Se casa. Mi viejo se casa. Y se casa con la mujer que ha estado con él todos estos años. Y se casa no sólo por civil, sino por religioso, porque ha comprendido que necesita la bendición de Dios para que su vida tome un nuevo rumbo.

Me pareció locazo. Nunca jamás hubiera pensado tener una conversa así con él, y mucho menos escucharlo decir que se iba a casar y por voluntad propia. Me pidió que por favor lo acompañe en la ceremonia. Que será algo pequeño, mis tíos - sus hermanos, y las hijas. Me dijo entre lágrimas que se arrepentía de tantos años distanciado de mí, de nuestra mala relación y de toda la amargura que eso le trajo a su vida. Es más, me dijo que converse mucho con mi pareja, que no me deje ganar por los orgullos y que la verdad frente a todo siempre es mejor. Por último, me dijo que cuide mucho a mi madre, pues es una mujer magnífica que me sacó adelante a pesar que él nos abandonó. Que espera que le perdone por su ausencia en nuestras vidas, pero recièn ahora se ha dado cuenta que hombre no es el que màs mujeres tiene, sino aquel que vela por el bien de los suyos.

Algo tarde todo esto, pero me da gusto ver que al menos se ha dado cuenta de muchas cosas, y creo que va por buen camino. Me siento feliz por èl.

El gordo
Creo que pronto nos juntaremos. Es decir, creo que pronto vendrà a vivir conmigo. Hasta hace poco, no me sentìa del todo convencida, pero ahora sì. Quiero tenerlo a mi lado, reìr, llorar o pelear, pero sòlo con èl. Creo que la cabeza se me està asentando, mis ideas estàn màs sòlidas y creo que es buen momento para este paso. Espero nos vaya bien y tal vez, quien sabe, a lo mejor, nos casemos algùn dìa, sobre todo cuando juntemos billete. Estamos aprendiendo a dominar nuestro caràcter, a moderar nuestra lengua cuando hablamos o renegamos y sobre todo, a compartir los planes a futuro. Què bonito, no? (la màs cursi!).

El Gym y el portuguès
Si no fuera porque voy al gym casi todos los dìas, creo que a este paso ya hubiera quemado cerebro en el trabajo. Sigue siendo mi vàlvula de escape, y me ayuda a equilibrar mi energìa. Hace poco descubrì lo riquìsimo que es pasar el tiempo en el sauna. Yo, que nunca en mi vida habìa sudado, yo, que nunca habìa logrado formar una gota de sudor en la frente, veo con mucha gracia còmo mi cuerpo se baña en sudor, y que encima, gotea cual caño =)

Què rico se siente sudar, sudar y sudar. Bailando, en la bicicleta, en la faja, en las màquinas, donde sea pero sudando. Siento que es una sana inversiòn. No he bajado de peso, por el contrario podrìa decir que he subido un kilo. Bueno, tampoco es algo que me quite el sueño, no? Pero tengo muy buen diente. Ese es mi problema. Sin embargo me siento bieny mientras equilibre todo lo que trago con el gym, pues en buena hora.

El portuguès... Ay, el portuguès... No era tan sencillo como pensè. Para nada. Està bien jodido, al punto que de ser horas de relax, se han convertido en horas de stress. Pero lo terminarè bien y podre manejar bien.

Tenho um amiguinho querido, quem gosta muito de falar me em portugues, pero por joda, creo que de tanto y tanto se le estàn pegando algunas cosas jejeje.

Curiosidades
Alguna vez han sentido que de pronto se topan en la calle con una persona que simplemente los paraliza? Pues el otro dìa en la combi estaba yo, con destino a Miraflores, cuando en eso veo unos ojos jaladitos en la vereda. Era un pata de unos 30 màs o menos, que desde el momento en que cruzamos miradas, me paralizò. Lo loco fue que el pata subiò a la combi y se sentò detràs del chofer, frente a mì. No supe que hacer, sentìa que su sola presencia me dominaba por completo. De pronto querìa reìrme sola, de pronto querìa hablarle. No atinè a nada màs que enviarle un mensaje de texto a una amiga para contarle lo que me estaba pensando. Bajè donde me correspondìa y horas despuès aùn sentìa su mirada fuerte sobre mì. Lo volverè a ver?

Estos fueron los hechos màs resaltantes de las ùltimas fechas. Sin màs que informar por el momento, me despido no sin antes dar muestras de mi afecto y estima personal para con ustedes.

Atentamente,

Chanex!

Ps. Mucha wada con esto de los informes caraxo!

Ps. El tema econòmico serà informado en otro post en el transcurso de los dìas.

Y es que sucede así...

Hubiera querido escribir sobre el viaje que hice a Piura por cuestiones laborales.

Hubiera querido escribir sobre lo rico que comí estando por esas tierras.

Hubiera querido contar sobre el calor insoportable del norte.

Hubiera querido contar sobre el accidente "sangriento" que tuve gracias a Andrés (el que viene cada mes) y el roche que tuve que pasar pero que sin embargo, gracias a un colega, quedó como un acontecimiento minúsculo.

De eso me hubiera gustado escribir en este post.

También me hubiera gustado escribir sobre la última pelea que tuve con mi gordo.

Me hubiera gustado contar que fui una COJUDA (así, en mayúsculas) por cagarla como la cagué.

Hubiera querido escribir sobre lo mal que me sentí luego de hacerle tanto daño a mi gordo.

Hubiera querido escribir sobre cómo fue que esto me permitió darme cuenta que sí pues, estoy enamorada de él.

Hubiera querido escribir sobre cómo fue que toqué fondo en mi vida para darme cuenta de lo mucho que tengo, de lo poco que valoro, y de lo nada agradecida que soy.

Hubiera querido escribir también que me he dado cuenta de todo esto, y de que ahora quiero hacer las cosas bien en mi vida, y si es al lado de mi gordo, mejor.

Hubiera querido escribir cómo fue que todo se arregló y que ahora estoy dando lo mejor de mí en nuestra relación.

De todo esto me hubiera gustado escribir en este post.

También hubiera querido postear sobre la respuesta negativa que recibí sobre un proyecto académico que tenía en manos y que no salió. Será que mi Perú me quiere por estos lares todavía.

Me hubiera gustado escribir sobre todo lo que pensé en esos momentos y que me llevaron a decidir replantear planes.

Pero no podré escribir sobre eso. Algo más hard pasó y sobre eso escribiré tratando de resumir el asunto.

No recuerdo si lo escribí antes, y si no lo hice pues aquí va de nuevo.

Nunca viví con mi padre. Él dejó a mi mamá cuando supo que yo venía en camino. Mamá sufrió mucho luchándola sola y tocando puertas en busca de trabajo conmigo en brazos. Dios es grande y buenas personas se cruzaron en nuestro camino y nos ayudaron durante muchos años, y aún ahora nos siguen ayudando o apoyando. Una de esas personas es mi padrino, a quien adoro con la fuerza con la que sólo se puede amar a un padre.

Así que de mi padre sólo noticias vagas. A diferencia de él, mis tíos y mis abuelos - sus hermanos y sus padres respectivamente - siempre me tuvieron a bien, y cuando podían ayudaban o trataban de interceder por mí con él. Pero siempre se corrió de mí. No sé por qué.

Muchas veces ya cumplidos los 12 años, y consciente de cómo eran las cosas, intenté buscarlo y entablar una relación que nunca funcionó. Siempre tuvo para conmigo un trato frío, muy frío y distante. En muchas ocaciones le rogué por miserables centavos cuando la cosa estaba bien difícil, y otras tantas le rogué por migajas de cariño. Y siempre terminé con el corazón roto. Me preguntaba si el que sólo engendraba merecía ser llamado padre.

Muchas veces lloré, grité, y maldije a mi padre porque sentí que lo único que me dio fue el apellido. Sentía que la vida no era justa (a pesar que nunca me faltó nada gracias al apoyo de mi padrino, mi madrina y mi mamá), pero seguía pensando por qué él era así conmigo. Total, yo no tuve la culpa de venir al mundo, y mucho menos de pedirle que me firmara.

Ya en la universidad, quise llevar la relación a un plano más polite, tener una relación no cordial pero al menos alturada. Pero no se pudo. Incluso hasta el año pasado, luego de la muerte de mi abuelita (su mamá) que pudimos conversar algo, las cosas volvieron a ser como antes, su frialdad me demostraba que yo gastaba pólvora en gallinazo porque nunca sería capaz de tratarme con algo de cariño. Mi madre siempre me acogió con los brazos abiertos luego que él me dejara llorando y sumida en la más profunda de las tristezas. Ella dice que no tengo que juzgarlo, que hay un Dios que todo lo ve y que por algo pasan las cosas. Creo que tiene razón. Pero es bien difícil no sentir resentimiento hacia él. Es bien yuca no sentir ese nudo que siento en la garganta mezcla de cólera y frustración cada vez que pienso en él.

Pero la vida da vueltas, dicen. Y es verdad. Exactamente hace una semana me disponía a almorzar tranquila con mi gordo y ver unas pelas en mi casa, cuando sonó mi celular. Era una de mis medias hermanas quien llorando me decía que vaya al hospital por la zona de emergencia pues mi padre había sufrido un accidente y que lo iban a operar en ese instante.

Quedé fría. Helada. Conmocionada. No había visto a mi padre desde julio del año pasado creo, cuando, para variar, terminé llorando en el hombro de mi abuelito en plena calle, porque mi papá me hizo un desplante horrible. A veces me llamaba al celular y nuestras conversaciones no pasaban de 1 minuto, decía que por qué no iba a visitarlo, a lo que yo le respondía "¿Y por qué mejor tú no me visitas?" y acto seguido las despedidas y chau chau. Hasta nuevo aviso.

De pronto me dicen que estaba en emergencias y que lo iban a operar. Sentí que el estómago se me movió. No sabía qué hacer. No sabía si ir o no ir. Para qué? Por qué? Merecía tener mi presencia? Aquella persona que siempre me trató de la forma más indiferente posible, merecía que lo vaya a ver? Que me preocupe por él?

Quedé sentada al borde de mi cama, con la mente en blanco y con el cuerpo frío, hasta que al rato el gordo llegó a mi casa y me encontró así. Atiné a abrazarlo y llorar de desesperación. Aquella llamada rompió la tranquilidad que tuve por casi 1 año. El gordo me dijo que vayamos para ver qué pasó. Así lo hicimos.

Resulta que mi padre jugando fútbol resbaló y se golpeó la cabeza contra la loza. El golpe lo dejó (más) sonso pero aún consciente regresó a su casa. A la media hora empezó a vomitar sangre en cantidades grandes y cuando llegó a emergencias, lo que los médicos dijeron fue que no había nada más que operar en el acto antes que la inflamación causada por el derrame de sangre en el cerebro afectara éste y ya no haya nada que hacer.

Entró a sala de operaciones para que le abran la cabeza y regresé a mi casa. Y pensaba. Qué pasa si se muere? Qué pasa si vive? Por qué mierda estoy así? Por qué me angustio por alguien que nunca se angustió por mí? Por alguien a quien nunca le importó saber si yo tenía qué comer, qué vestir. ¿¿¿Por qué???

Y así estuve estos días. Con sentimientos encontrados. Conversé con algunos amigos, unos me decían que no tenía por qué ponerme tan mal por alguien que nunca me tuvo en cuenta. Otros me decían que mejor no me ilusione pensando en que si se salvaba, él iba a cambiar conmigo. Otras personas me dijeron que haga lo que mi corazón me dicta. Y eso hice.

Quiero cumplir como hija. Quiero hacer las cosas bien. No lo hago porque pienso que las cosas serán distintas, sino porque simplemente siento que es lo que debo hacer.

Curiosa es la vida. Un día estamos arriba y otro, abajo. Anoche tuve que quedarme con él toda la noche en el hospital, porque mis hermanas y toda la familia hicieron una actividad pro fondos de salud, entonces encontré que la única forma de ayudar era quedándome al cuidado de mi padre en el hospital.

Los hospitales del estado son la cosa más terrible que pueda haber. Los que allí trabajan creen que tienen el poder de todo y no se ponen a pensar que atienden a personas, a seres vivos que merecen siquiera un ápice de respeto. Llegué a las 7 de la noche y hoy regresé a casa a las 8am. Me quedé a su lado toda la noche. Lo llevé al baño cuando necesitó ir. Lo arropé cuando tenía frío. Le di de beber cuando tuvo sed. Perseguí a las enfermeras cuando le tocaban sus medicamentos. Y no dormí en toda la noche. Traté de poner mi mente en blanco. Conversamos. Me preguntó como me iba y en qué andaba. No sé si le dio gusto, no sé si se sintió orgulloso. Simplemente me escuchaba atento. Luego me contó algunas cosas en las que él anda y yo también lo escuché atenta.

Creo que a veces la vida nos regala una segunda oportunidad, la verdad es que sería regio que él empiece a escribir en sus hojas nuevas una nueva historia, donde no haya resentimiento, no haya orgullo y donde decir "perdón" o "te quiero" sea más sencillo que respirar. Pero sé que pido bastante. Mejor no me ilusiono. Cumplo como hija y eso es todo. Tal vez me anime a volver un toque más fluida mis visitas luego de que mejore y esté en su casa. No lo sé.

Yo siempre he tenido los brazos abiertos y creo que hasta me he congelado y con calambre y todo en busca del abrazo que nunca llegó. No quiero que me vuelva a pasar. Sin embargo, anoche pensaba si es que él era consciente que aquella hija a la que ignoró por tanto tiempo, era la que le estaba ayudando a ponerse el pantalón.

Dios ha permitido que mi padre salga de esta. Su salud está mejorando y confío en que se recuperará pronto. No guardo rencor. No guardo rabia. Podría decir que al fin he perdonado 27 años de ausencias. Pero igual me siento muy triste. Mamá está de viaje ahorita, llega el jueves y la espero con ansias pues deseo abrazarla y llorar y decirle que la adoro. Necesito destapar esto que llevo en el pecho.

Intentaré no demorarme tanto en volver a postear.

Até logo!

Quién diría...

Mis vacaciones de 7 días terminan hoy domingo. Y por qué solo fueron 7 días? Porque si tomo más, luego encuentro mi escritorio lleno de trabajo pendiente, o lo que es peor, no encuentro mi escritorio de lo enterrado de trabajo que tengo. El año pasado me pasó eso, tomé 15 días a inicios de año, y 15 días en septiembre, y cuando volví quise darme de cabezasos contra la pared porque se me acumuló tal cantidad de trabajo que no pude terminar, y que felizmente gracias a mi "ascenso" - por llamarlo así - se lo chantaron a mi reemplazo jejejeje.

Así que este año, sabiamente, distribuí mis vacaciones en 4 partes, y me relajo un poco sin que se me acumulen tantos pendientes.

Sin embargo, lo que tuvo que ser días de relax y paz, no lo fue tanto pues - para variar - estoy en un 3 proyectos más que interesantes: uno es personal, y los otros 2 son laborales, sin contar que también tengo las clases de portugués por las noches. Así, mi cerebro estuvo funcionando estos 7 días, y mi cuerpo también. Cómo así? Pues aquí va...

En algún post comenté que no me gustaban los gimnasios porque todo era maquinitas y alquien que jorobe para que las uses. Además creo que también dije que me daba mucha pena ver desde mi ventana cómo la gente se afanaba y no dejaban de usar las maquinitas para sudar un poco. Y es que desde mi casa, tengo la vista a uno de los gyms más posicionados de Lima. Y siempre me decía a mí misma "qué joda, se pasan todos los días sudando como locos, bah!". Pero como dicen, nunca escupas al cielo que en tu cara te puede caer, y heme aquí ahora, pendiente de la hora por ir a sudar un poquito al bendito gym.

Pozi, resulta que el pago por la natación subió, los horarios se volvieron un toque estrictos, y la verdad es que ya no me convenía. Y más si yo quería ir todos los días, al final terminaba pagando casi 300 soles por mes con tal de ir diariamente. Y en cuestión de números, el gym me sale mucho más barato, incluso menos de la mitad de lo que me salía la piscina, y con el plus de que lo tengo a 1 cdra de mi casa y puedo ir a cualquier hora, los días que quiera, y cuantas veces quiera. Así que sucumbí ante las garras del gym.

Y empecé el sábado pasado. Pero como detesto las maquinitas, prefiero las clases grupales y para suerte mía, aproveché las sesiones de Tae Bo. Qué rico se suda carajo! Patear y meter puñetes resultó ser la mejor terapia para el stress. Justamente ayer hubo un master de combate, 2 horas de puñetes y patadas con música muy buena, que al final me hizo sentir más que bien. Pero claro, que no quede la idea que soy una fanática de los ejercicios y dietas y esas cosas. En mi vocabulario no existe la palabra dieta. No pretendo bajar de peso. Uno de mis pecados favoritos (entre otros) es el de la Gula. Y es que tengo muy buen diente. Es un placer casi orgásmico para mí, poder comer algo muy rico, y vaya que disfruto comiendo lo que me gusta. Simplemente me metí al gym para poder liberar energía, relajarme y sacarme un poco de la mierda que se me acumula en el trabajo y con los problemas personales de siempre. Es como si en el sudor se fueran las penas.

Es una lástima que ya no vaya a nadar, a lo mejor lo retomo más adelante, pero mi economía no está para soltar 300 soles mensuales y caminar 13 cuadras en 10 minutos, y volver con las mismas. No me arrepiento del gym, sin embargo, mañana vuelvo al trabajo y tendré que levantarme tempranito para sudar un poco antes de irme a trabajar. Para mí, esto es como una forma de equilibrar mi vida. O será que esto me ayuda con mi hiperactividad?

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No sé en qué momento fue que mi presupusto marcó rojo. Estoy a las justicias desde fines de enero, y la verdad no tengo idea qué fue lo que hice con mi gratificación de diciembre. Es más, siento que ni ropa me he comprado. Estoy con un déficit de 300 soles que en mayo cubriré (Oh God Bless the CTS), pero necesito ahorrar. Ya tengo el propósito o fin, tengo las ganas, solo es cuestión que el cash llegue a mis manos para poder ahorrar. Eso sí, necesito comprar algo de ropa de media estación, y de paso cambiar el look porque ya me cansé de usar tacos, y nada más. Lo demás, al chanchito.

Además necesito ropita de deporte, lycras y esas cosas para poder sudar bien. Pero nunca tan putona como el par de señoritas que he visto en el gym, a quienes el aceite de avión rebalsa por sobre sus minúsculas prendas. Puajjj!! Qué asco!!! Dios perdona el pecado pero no el escándalo, y ellas ya se pasaron de escandalosas. Si yo fuera hombre, no sé si me animaría a enredarme con alguna de ellas. Lo que tienen ya es muy burdo a la vista, no sé, creo que no la haría. Pero ahora que la pienso bien, con los hombres no se sabe, porque ellos se rigen por el lema "en época de guerra cualquier hueco es trinchera", sorry pero... es la verdad, no ofense, jajajaja.

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Vivo en un departamento, es pequeño, pero mío al fin y al cabo. Tengo lo necesario para sentirme cómoda, pero por estos días la comodidad no la encuentro, y esto porque tengo una huésped (de mi mamá) que de pronto se está quedando en casa, porque ha venido del norte a hacerse unos chequeos médicos. Hasta ahí no le veo problema. La vaina es que me desespera que viva y muera por ver novelas, es como si su organismo estuviera sincronizado con el televisor, y desde las 6pm hasta las 10pm no para. Si le hablas, no te escucha, salvo en propaganda. Encima, o es bien inocente, o es bien cojuda... O será que tengo poca paciencia?

Además, va y viene de un lado a otro, me ve que estoy trabajando en la pc y viene y me conversa, me habla de cualquier cosa y yo cortesmente la corto. Más rato otra vez lo mismo. Tamare, así no puedo ver ni un pornosotros sin ser molestada jajajajajajaja.

Tiene 41 años, es soltera, no tiene hijos y es señorita. Osea es virgen. Le detectaron hace un par de años un quiste en una de las mamas, y otro quiste en uno de los ovarios. Sin embargo, a pesar de ese diagnóstico no volvió a verse con el doctor y ahí quedó todo. Por miedo dice. Ahora que vino a Lima para chequearse nuevamente, debido a que una de las mamas le ha crecido bastante a causa del quiste, se ha quedado más asustada todavía porque el doctor le dijo que tenían que hacerle una biopsia del quiste de la mama y de LOS quistes de los ovarios, claro, porque en todo este tiempo le creció otro y ella bien gracias.

La cuestión es que es desesperante para mí verla llorar porque le mandaron que se haga una ecografía transvaginal y ella no quiere, porque como es señorita y virgen, cómo le van a meter algo por ahí, si es virgen, no puede, cómo los médicos le van a decir eso... Juat??? Si fuera mi amiga, hace tiempo le hubiera metido un par de cachetadas para que se desahueve (disculpando la expresión) pero se me hace incomprensible cómo puede afanarse tanto por una pinche membrana, cuando la virginidad está en el cerebro y no ahí abajo. Y sobre todo, cuando de eso depende su salud. Qué vaina!!!

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Curiosidades del cuerpo humano. En esta semana me he podido dar cuenta de los cambios que tengo gracias a la explosión de hormonas que trae consigo la ovulación. Siempre he podido controlar mis ganas, pero esta semana ha sido terrible. Y como el gordo anda en su chamba, y por estos días bien jodida, ni pa' decirle "oye quédate hoy en mi casa". Chamare.

Y como ando con ideas en la cabeza, me quedo con un videito muy "motivador", jejejeje.



C u.

Los amigos de toda la vida!

Y el tiempo está pasando rápido... muy rápido... De pronto ya es abril, y hasta hace poco aún sentía que estábamos "a inicios de año".

Y estas últimas semanas las cosas han estado recontra movidas en mi trabajo. El ambiente está enrarecido y las caras largas abundan. Además, la mala leche vía Facebook (que es, se podría decir, la red oficial del webeo en mi chamba) con comentarios ácidos está a la orden del día. Y es que no me entra en la cabeza lo mucho que puede chocar a las personas que les rompan su rutina y que les quiten su corona, por decirlo de alguna manera. Si bien es cierto, el manejo de personal no es de lo mejor y las formas en que se imponen las ideas tampoco es lo recomendable, chamba es chamba, como dicen, y creo yo que no nos queda nada más que hacer nuestro trabajo, pero muchos se resisten, y arman tremendo berrinche que sólo aviva el fuego de las intrigas y chismes, osea, malaso...

Pero yo estoy en mi burbuja y trato que no afecte mi entorno, vendrán tiempos mejores, estoy segura, como dice un coleguita "si ya tienes la yuca adentro, sólo te queda moverte bien" jajajajajaja, y creo que tiene razón. A fines de abril viajaré al cálido norte por trabajo, así que mi Semana Santa será más que tranquila, trabajando frente a la computadora, pues con tanta cosa que he tenido estos días no he podido avanzar algo que es muy urgente.

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Hace unos días vino del extranjero una amiga mía muy querida, nos conocemos desde que tenemos 6 años de edad y la verdad es que nuestras vidas tienen mucho en común, lo que ha hecho que nuestra amistad, a pesar de las distancias, se conserve muy bien. Vino el año pasado por unos días pero por falta de billete no llegué a verla pues había organizado una reúna en una disco fichona. Pero este año, a pesar que no tengo un puto sol y la verdad no sé qué mierda pasa con mi plata, decidí no perder la oportunidad de verla y reunirme con ella.

Como con el gordo no estoy ni mal ni bien, sino todo lo contrario, decidí salir con mi amiga, solo las dos, a lady's night! y vaya que fue hardcore. Hace un chupo de tiempo que no me la pegaba de esa forma, que no me acuerdo de muchas cosas que hicimos (tranquilasas, claro está).

Salimos por la mañana y nos insolamos en alguna playa de Miraflores hasta las 5 de la tarde, la idea era ir luego a Asia pero una amiga le falló y por cuestión de presupuesto decidimos quedarnos en Lima. Así que nos regresamos al hotel donde se alojó y arrancamos con una botella de ron y cocacola, y tortis picante, mientras veíamos la pela "Hangover", la recomiendo!

Para las 11 de la noche yo ya estaba hecha pero teníamos que hacerla en alguna chingana, así que fuimos a Barranco y de ahí a otro huequito, donde nos encontramos con un amigo a quien quiero un huevo, pero el falla dijo que nos daba el alcance en Miraflores y nunca apareció (me la debes Iuxxx). Ella y yo terminamos en una disco de la calle de las pizzas (horror!) jajajajaja, pero poco nos importó el lugar, lo que importaba era bailar como locas y divertirnos, y así fue. Teniendo el ron encima, en la disco combinamos con cerveza, y para cerrar la noche, un shot de tequila. Ese fue el inicio del fin... Al día siguiente yo estaba en coma etílico, qué horror, nunca me había dado una resaca así, parecía un perro con distemper, temblando en mi cama. Y para colmo de males, perdí mis lentes jajajajajajajajajaja, mis lentes!!! Una extensión de mi cuerpo, cómo pude perderlos??? No idea.

Aún así, volvimos a solearnos en la playa y creo que fue peor, el espectáculo que di no fue el de los mejores en mi vida. Se me vino el gato varias veces y terminé malasa, tanto así que mi amiga tuvo que dejarme en casa, jajajajaja. Lo que no podía creer es que ella estaba paradita, un poco resaqueada pero si le decían para una chupeta ella se apuntaba. Es deportista, así que asumo que su buena condición física la ayuda a pararse de cualquier resaca. Envidiable.

Contarnos nuestras penas, nuestras alegrías, nuestras dudas fue un alivio para ambas. Poco faltó para que termináramos llorando por antiguas penas, pero reímos y reímos mucho, porque todo es superable en esta vida, hasta aquellas penas que en algún momento nos quitaron la luz del día. Hace tiempo no me sentía tan bien.

Ayer domingo volvimos a ir a la playa, y por la noche terminamos brindando en Miraflores. Ella se va hoy y me quedo con un sabor a nostalgia. La verdad es muy bonito tener amigos con los que has compartido muchas cosas, toda una vida, y ver cómo seguimos creciendo me hace sentir que pese a todo, la vida es maravillosa...

Hasta pronto amiga!

Ooopsss!!! Hi did it again (Tamare!)

Y aquí estoy de nuevo, intentando vomitar lo que siento, para ver si así me siento mejor, porque para ser sincera, ahorita solo tengo ganas de dormir, dormir y dormir sin que nadie me joda al teléfono y me despierte.

Me siento aburrida, cansada, confundida, por ratos rabiosa, y hasta frustrada. No puedo manejar mi problema, y no sé qué hacer para cambiar el rumbo de las cosas. Y lo que más me jode, es que creo (ojo, creo) que yo no puedo hacer mucho, pues ya intenté varias formas de atacar el problema, pero esto no depende de mí, escapa a mis manos, va más allá de mi razón y de mis posibilidades.

El gordo, mi enamorado, lo volvió a hacer. La volvió a cagar y bien feo. Una vez más, no pudo con sus celos enfermizos y todo terminó hasta el culo. No voy a contar con lujo de detalles todo lo que pasó esta vez, solo resumiré que la fregó, y que le dije que ya no quería saber nada más de él en mi vida y que me deje en paz, y que de pronto alguien gritaba mi nombre en la esquina de mi casa a las 2 de la mañana, y que 15 minutos después lo tenía en mi cuarto a punto de largarse de mi vida con sus chivas en la mano. Por Dios santo, qué cosa más espantosa...

Osea, digo, no puede ser, a tanto puede llegar una persona que no se da cuenta que puede perder a su pareja tan solo por sus celos? Lo único bueno es que él ya se dio cuenta que lo que tiene es UN PROBLEMA, y que como tal, necesita ayuda profesional.

Y todos estos días me he sentido hasta las wiflas, con ganas de caminar sola, con ganas de chupar con cualquier amistad, para terminar llorando, con ganas de no tener una carga más en mi vida, pero luego no sé qué mierda hacer con todo el sentimiento que llevo dentro. Muy fácil sería terminar (y lo he hecho) pero no se puede, o mejor dicho no puedo, siento que quedo peor. Entonces ya no sé qué hacer.

Si alguien conociera a algún especialista en el tratamiento de este tipo de problemas, se los voy a agradecer bastante. Y todo esto por qué? Porque aún (tal vez estúpidamente) apuesto por esta relación.

Puta madre, qué mal me siento.

El enamorado marcador

Puedo soportar tu desorden.

Puedo soportar que no bajes la tapa del wáter luego que meas.

Puedo soportar que arrases con la gelatina y que no laves ni uno sólo de los potecitos.

Puedo soportar que ni siquiera tengas el tino de dejar los potecitos en el caño de la cocina.

Puedo soportar que te cojas las 4 almohadas de la cama para ti solo, obligándome a usar el comodín mientras vemos tele.

Puedo soportar que te comas las uñas y las carnecitas al rededor de éstas.
Puedo soportar tus muletillas al hablar.

Puedo soportar tu pésima ortografía, al fin y al cabo, eres brillante con los números.

Puedo soportar que cuando llegues, tu mochila la dejes en la sala, tu fotocheck en la mesa del comedor, tu nextel en el cuarto de la compu, y tu cargador en mi cuarto.

Puedo soportar que no sirvas para los idiomas.
Puedo soportar que no quieras vivir en el extranjero.

Puedo soportar que cuando te afeites me dejes el lavatorio del baño sucio.

Puedo soportar que camines calato por la casa mientras mi vieja no está, total hace calor.

Puedo soportar que dejes revistas, periódicos, tapas de dvds, o cualquier cosa que se pueda leer en el piso del baño al costado del wáter.

Puedo soportar que no laves los platos cuando a ti te toca, total no lavas bien.

Puedo soportar que me dejes los cojines de los muebles de la sala desordenados, luego que tomaste tu siesta.

Puedo soportar que te pegues horas de horas viendo CMD.

Puedo soportar tus chanchos y pedos en circunstancias jocosas, total, yo también lo hago.

Puedo soportar que no te guste bailar, y menos reggaeton.

En verdad, creo que puedo soportar algunos pequeños detalles más.

Pero lo que no te voy a soportar es que me controles cuando quieras, como quieras y donde quiera que yo me encuentre. No te equivoques. Eso no va a pasar.

Y esta furia? Y este vómito de quejas? Qué pasó?

Ahora que ya dejé de ser una mujer noctura, quiero retomar mi vida social. Ver a amig@s que ante veía, salir a comer, a pasear, a webear, a chupar, whatever... Y si es sin el enamorado, mejor. No dijo que me llegue salir con él, lo que pasa más bien es que quiero dedicarle un tiempo a las amistades, como antes, como tiene que ser, sin tener la presencia del enamoradito al costado, cosa que así se puede chismear de lo lindo, rajar de los ex, de los agarres o de quien sea, sin el menor temor que el enamorado se gane con tu background...

Es cierto que esto puede significar que me esté aburriendo de mi enamorado, pero no lo creo, es simplemente que siempre me ha gustado ser libre e independiente porque la voluntad de los pueblos así lo dispone y porque mi madre siempre me lo permitió. Entonces para mí no hay novedad. La novedad es para el gordo. Cree que porque estoy con él puede controlar mis pasos y las personas con las que salgo. Nunca tanto.

El otro día salí con una amiga de colegio a la que quiero mucho, y con la que nos vemos después de casi un año. Le había comentado al gordo que iba a salir con esta amiga a comernos un heladito (ojo, le comenté, no le pedí ni permiso ni nada). Resulta que a las 2 horas, el individuo me llama en un tono bastante seco y me dice:

- ¿Dónde estás? Hasta qué hora piensas quedarte??? Con quién estás???

Eso fue más que suficiente para que yo me vuelva un energúmeno:

- Vuelvo a mi casa cuando quiera, deja de fastidiarme que estoy con mi amiga al lado.

- Oye a mí no me vas a decir que deje de fastidiarte, quiero saber a qué hora vas a estar en tu casa, yo ya estoy saliendo para allá, así que apúrate!

- Ubícate, ya? Ya te avisaré cuando esté en camino.

Acto seguido corté la llamada y simplemente no contesté las siguientes 16 llamadas.

Me dio tanta rabia pensar en que él no puede dominar a sus demonios y entra en pánico de sólo pensar que yo estoy con otra persona (sea mujer u hombre) mientras él no esté presente. Huevadas. Cuando llegué a casa lo llamé y le dije que ni se moleste en bajar a mi casa, porque no lo quería ver. Pero apareció. Como nunca, lo despaché en menos de 10 minutos, y no le dije ni mierda. Era más que obvio que él la había cagado pero las cosas estaban hechas. Además siempre es bueno tener la sartén por el mango.

Luego de arreglar la vaina, me quedé pensando. Esta pelea me hizo pensar - nuevamente - en si podría soportar ese tipo de situaciones por el resto de mi vida, en el caso que estemos destinados el uno para el otro y convivamos, tengamos hijos y seamos familia. La verdad es que me desanima mucho. Me está costando ceder mi independencia y encima el otro se da el lujo de cagar mi vida social. Ni hablar.

Qué hacer? Qué hacer??? Funcionará el ultimatum que le di al gordo? Firme no pienso soportar más huevadas...

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Últimamente no he podido dormir bien. Tengo algunos asuntos pendientes en mi chamba que terminar prontito, y no concilio el sueño pronto. Es media noche y sigo dando vueltas en mi cama, además el bochorno infernal que siento no me deja dormir. Me desespera. Sin embargo, a la mañana siguiente despierto hecha una speedy y sigo trabajando como si mi cuerpo hubiera descansado lo suficiente.

A pesar de dormir poco, estos días he tenido un par de sueños que me han hecho pensar. Por lo general yo tengo unos sueños bien alucinates, unos tramas bien enrededados, a veces despierto preocupada. Pero los últimos sueños que he tenido me han hecho preocupar, pero porque fueron sueños en los que personas de mi entorno laboral aparecían. Tolacas.

De pronto , yo brincaba sobre X y disfrutaba mientras me tomaba fotos. Ptm, cómo es posible que mi cerebro maquine semejante historia? Encima con alguien que nunca jamás se me hubiera ocurrido, firme, nunca jamás.

Ayer tuve otro sueño similar con otra persona del trabajo, en esta ocasión era Y y tolacas disfrutábamos de enredar nuestras lenguas. Por qué??? Será mi subconciente? No lo sé, lo que sí sé es que ahora ya no puedo mirar a estas personas a los ojos, porque inmediatamente recuerdo las escenas de mis sueños, chessssssssssssss...

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Una pregunta abierta. ¿Por qué justamente cuando siento que estoy bien o tranquila, justo ahora el diablo mete el rabo y las tentaciones están a la orden del día? Intento no mirar, intento no escuchar, intento no leer, pero ahí están las oportunidades sólo para que yo estire la mano y tome la que mejor me plazca.

Ptm!!!

Venga, vamos con una cancioncita que despierta mi creatividad... jejejeje

(en el sillón de mi cuarto pienso en ti con mis manos...)

Tengo más cosas que vomitar, pero sin falta la próxima semana.

Abur!

¡Qué! ¿Ya estamos 2010?

No escribo hace casi un mes. Lo extrañaba harto, pero yo y mis circunstancias no me lo permitían. Necesitaba desfogar urgentemente y heme aquí hoy, dispuesta a vomitar ideas en el nuevo año.

Debo despojarme de la capa de egoísmo que todo humano llevamos encima, para poder agradecer a Dios por un 2009 muy gratificante. Considero que alcancé las metas propuestas y emprendí nuevas tareas que me permiten crecer como persona y como profesional. Conocí más personas y nuevas amistades han nacido.

Sin embargo, no todo ha sido color de rosa. He tenido mis altas y mis bajas (muy bajas por cierto). Pero lo divino del hombre está en, precisamente, perdonar y aprender de nuestros errores. Pero bueno, bueno, bueno... Resumiré lo más importante de los últimos días del 2009...

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Como buena enamorada, me volví hincha de Alianza (sí, sí, sí, ya sé que muchas personas me condenarán por esta afiliación pero qué puedo decir). Así, mi gordo propuso ir a ver los partidos que disputaban el campeonato: el clásico de siempre.

Fuimos el feriado al Matute, pero por mi terquedad nos quedamos afuera del estadio sin poder entrar. ¿Cómo así? Pues bien, en mi ignorancia futbolística, no sabía yo cómo eran los clásicos. He ido varias veces al estadio pero ésta era la primera vez que iba a ver a Alianza-U. Mi enamorado me dijo para estar a más tardar medio día y yo le respondí con un "Nunca tanto, no???". Caímos por ahí plan de las 2.30pm. Craso error.

No pudimos entrar. Ya había una de cola de un centenar de personas que gritaban de todo con entradas en mano, desde pituquitos hasta personas de mal vivir (las caras lindas). Todos nos empujábamos unos a otros y yo que había llevado mi última adquisición, mi camarita fotográfica Kódak, tenía un miedo atróz a que en una de esas me bolsiqueen y adiós camarita. A las 3.30pm mi gordo emprendió plan fuga, y a las 4pm estábamos en mi casa viendo la entrada de Alianza vía CMD... Una pena, para variar, perdimos y felizmente no llegamos a entrar porque eso de ver perder al equipo de sus amores al gordo no le iba a caer nada bien...

El siguiente clásico fue en el Monumental, y todo auguraba una tarde triste: el cielo gris, los titulares monses de los periódicos, los jugadores lesionados de Alianza... Pero nunca pensé que ese día resultara ser uno de los peores que he vivido.

Fuimos a un palco, por cortesía de una amistad del gordo. Él se reencontraba con gente de su universidad que no veía desde hace años. Y todo iba bien hasta que entramos al palco y encontramos al manchón de amigos. Ahí empezó la cosa.

De pronto, era él, sus amigos y yo, la enamoradita nueva y desconocida para ellos. La presentación de rigor:

Gordo: Hola fulanito a los años, qué tal, oye te presento a mi enamorada Gisela.

Amigo: Hola mucho gusto.

Yo: mutis.

No la paran?

No saben qué pasó?

Pues es más que obvio. El gordo se confundió mi nombre POR EL DE SU EX, al momento de mi presentación.

Luego que soltó la cojudez, yo, en aparente tranquilidad, volteé y le metí una mirada que creo le quedó claro que lo mandaba bien a la mierda. Acto seguido, pareció darse cuenta de la cagada que había cometido y se asustó y me cogió la mano "puta madre, me confudí, perdóname, perdóname...".

No había más que decir, no había más que hacer. Mis ojos se llenaron de lágrimas de coraje y sólo quería desaparecer de ahí. Si no hubiera sido por el hecho que el Monumental está bien lejos y que había harto piraña por los alrededores, yo me largaba en one nomás. Pero no, no podía quitarme. El incidente ocurrió cerca a la 1 de la tarde, y desde entonces yo me volví muda. No hablaba, no reía, no gesticulaba, no hacía ni mierda, salvo demostrar que me quería largar de ahí y que sus amiguitos me llegaban a la punta de la teta izquierda, tanto con él.

En pleno palco, él se me acercaba, me decía que lo sentía mucho, que lo disculpe, que no supo qué pasó, que todo se le cruzo. A cuanto decía yo respondía con "Jódete mierda, lárgate que no te quiero ver". Yo estaba hecha una mierda. No soportaba estar en un lugar tan lejano, con gente desconocía y al lado de un huevón que confudió mi nombre. Impensable.

Pero me tuve que soplar todo el tiempo que estuvimos ahí. No hablamos hasta las 7 de la noche, cuando llegamos a casa. Y cuando hablé solo fue para decirle que no quería volverlo a ver. Él imploraba perdón, aún sabiendo que no lo tenía, pero creo que ya no había nada más que hacer. Me dolió tanto que confundiera mi nombre que hasta pensé que le podría perdonar cualquier otra vaina, menos errar mi nombre. Yo, que me he equivocado varias veces y he tenido malos pasos, no creo que fuera tan pánfila de errar el nombre de mi enamorado. Osea, no me hago la idea. ¿Cómo pudo pasarle eso?

Lloré y lloramos. Le dije cosas espantosas y de las que me arrepiento ahora. Resulta que cuando yo enfurezco me vuelvo una caca de gente, te abro la herida, dejo que te desangres, le pongo sal y rocoto para que duela más y te dejo abandonado. Mis palabras se vueven más mortíferas que granada de guerra y mi frialdad sólo se compara a la de un iceberg. Inclemente, despiadada. A eso le sumo la habilidad que tengo de voltear cualquier situación a mi favor (a veces con mucho esfuerzo dependiendo del grado de mi error), así que aproveché este error para sacar lo peor de mí.

Al final creo que más daño le hice yo a él, que él a mí. Luego de llorar tanto, la situación se arregló. No soy de las personas que piensan que roche tapa roche, porque yo he tenido los míos y bien bravos, pero era la oportunidad para tenerlo en mis manos. Arreglamos. Me contó qué fue lo que pasó por su cerebro para llevarlo a la confusión. Resulta que entrando al Monumental nos encontramos con uno de sus amigos que en su tiempo fueron compañeros de universidad. Éste conocía a la ex del gordo y al verme le preguntó de qué tal genio era yo y si era igual de jodida que la anterior. Al parecer esto le quedó dando vueltas en la cabeza al gordo. Sin embargo me parece bien cojudo confundir de esa forma a alguien. Luego de su absurda explicación, no tuve más que terminar el diálogo con un "qué huevón eres!".

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Hemos dado un gran paso. Creo que esto significa que ahora sí hay un compromiso más serio: hemos comprado una cama. Para nosotros.

Resulta que mi camita de plaza y media que me acompañó por varios años murió. El colchón ya no daba para más y me estaba fregando la espalda. Amanecía con unos dolores horribles y solo quería que alguien me aplastara para que los huesos se acomoden. Con lo que me gusta pasar el tiempo en mi cama, no me quedó más que tomar la decisión de cambiar de colchón. Así, le dije al gordo que me acompañara a la fábrica Paraíso, por la Av. Argentina, y ver qué encontraba. Llegamos y vimos tanta variedad que empezamos a probar colchón por colchón. Resultado: una cama box de doz plazas con colchón ortopédico, precio de fábrica. Mejor, imposible.

Cuando terminados de hacer el pago, caí en cuenta que esto YA significa otra cosa. Es pasar a otro level. Y me vino la tembladera de nervios al cuerpo y terminé llorando de la emoción. Al parecer él lo comprendió y me dijo que no había de qué temer. Ha llegado a entender mi pánico a las relaciones duraderas y creo que ya ideó la forma cómo hacerme perder ese miedo. La verdad me siento muy bien.

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Año nuevo, cama nueva, horario de trabajo nuevo. Este nuevo año dejaré de ser una mujer noctura (muajaja) para trabajar en el horario común de la gente, mañana-tarde. Me alegra un montón pero extrañaré a Mr. G (lo voy a extrañar un huevo) y extrañaré almorzar en mi casa sopita y segundo en mi plato sopero, ahora todo se limitará a mi táper de comida, será que bajaré de peso???

Estoy con todas las pilas encima, y me hizo muy bien recibir el año nuevo tranqui, viendo reventar los fuegos artificiales en el Circuito Mágico del agua al lado de mi gordo, y todo el día 1 tragando en cantidades industriales y viendo tele. Qué rico. En buena hora que no nos animamos a ir de camping con su family. Digo "no nos animamos" porque yo no tenía ningún ánimo. El día 30 me vino la regla y eso se llevó todas mis ganas playeras. Qué vaina. Al menos lo tomé de forma positiva, como me dijo una amiga muy querida, "alégrate, al menos vino", jajajajajajaja.

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Empezamos bien el 2010. Seguirá así. Éxitos, salud y amor para todos los bloggers y espero postear más seguido. Sorry por lo largo del relato pero así es cuando se me vienen las ganas de escribir.

Un videito para el remember:

Cambio y fuera.